Seminario: Disinformation, authoritarian fellow travelers & post-truth unbound

ECFR, CIDOB y The Institute of Statecraft organizaron un seminario sobre qué es la desinformación y su impacto en las democracias. 

Guests

Chris Donnelly, director, The Institute for Statecraft.

David Alandete, director adjunto, El País. 

Francis Ghilès, CIDOB. 

Francisco de Borja Lasheras, director de la oficina de ECFR en Madrid. 

Gustav Gressel, investigador, ECFR. 

Jordi Bacaria, director, CIDOB. 

Mira Milosevic, investigadora, Real Instituto Elcano.

Nicolás de Pedro, investigador, CIDOB. 

Peter Pomerantsev, London School of Economics.

El debate fue moderado por Cristina Manzano, directora de esglobal y miembro del Consejo de ECFR, y por Nika Prislan, coordinadora de la oficina de ECFR en Madrid. 

El miércoles 31 de enero, la oficina de Madrid organizó, en cooperación con CIDOB y el Institute for Statecraft, un seminario a puertas cerradas sobre “Disinformation, authoritarian fellow travelers & post-truth unbound: getting it right, getting the right answers”, dado el creciente protagonismo de este tema en España. El seminario se centró en el contexto de las tensiones políticas en la escena doméstica en muchos países occidentales, en los que predominan las noticias falsas, la interferencia extranjera, la polarización y los tweets virales. El objetivo era arrojar luz sobre lo que realmente es la desinformación, los diferentes actores que son responsables de ella y su posible impacto en nuestras democracias e instituciones. El seminario se dividió en dos sesiones y reunió a expertos, políticos y periodistas para tratar estos temas desde diferentes perspectivas. 
 
Durante la primera sesión, se discutieron temas preliminares: qué es la desinformación, los diferentes actores involucrados y su posible impacto. También se analizaron posibles recomendaciones a nivel parlamentario, mediático, de la sociedad civil e internacional. Se consideraron diferentes casos de estudio en Europa, Rusia y los EE. UU. La segunda sesión se centró en las diferentes redes (partidos, élites, empresas, medios de comunicación, etc.) que los poderosos del Kremlin están tejiendo para aumentar su influencia en Europa y su impacto político.